A tus amigos de Facebook tienes que quererlos, pero a veces también querrías matarlos. Aquí van diez tipos de personas que te gustaría no tener.

1. El adicto a los juegos.

Suena tu móvil, tienes una notificación. Anda, mira qué bien, alguien te ha escrito, ha comentado algo en lo que estás etiquetado, ha publicado algo en tu muro… No. Solo es la enésima invitación a ese juego odioso al que no piensas jugar.

En realidad tu amigo no tiene mala fe, ya que seguramente no sepa que está enviando esas invitaciones automáticas. Es peor cuando, siendo conscientes, te piden que les des puntos de Candy Crash, les des dinero para su endemoniada granja o vete tú a saber qué otra perversión.

2. El hiperactivo.

El hiperactivo es el que no para de publicar: cuando se despierta da los buenos días (“Buenos díaaasssssss”), al rato comenta el sueño que tiene (“Tengo sueñzzzZZZzzzZZZ”), luego le hace una foto al desayuno, luego comenta el tiempo (“Solazoooooo hoy va a ser un gran día!”)… y así, básicamente, hasta que se acuesta tras haber hecho suyo el timeline de todos sus amigos. Si encima ese día hay partido de fútbol, emiten su serie favorita o algo que se pueda comentar cada 5 minutos, estás perdido.

3. El frasecitas

El frasecitas (también conocido como el filósofo) es aquel que frecuentemente aparece para decir que “Si lloras por haber perdido el sol, las lágrimas no te dejarán ver las estrellas” o que “Más vale haber amado y haber perdido que nunca haber amado”. Si se le da bien la cosa, tendrá amigos que le pondrán comentarios como “Qué gran verdad” o incluso “Muy profundo, deberías hacer un libro con esos pensamientos”.

Si no, se limitará a hacerse fotos mirando profundamente el horizonte y a leer a Paulo Coelho.

4. El spammer.

Quizá sea uno de los más odiosos. El spammer, literalmente, no te deja en paz: te invita a todos los eventos habidos y por haber (desde el cumpleaños de alguien a quien no conoces hasta la manifestación por los derechos de la oruga occidental), te etiqueta en sus fotos junto a otras 40 personas (aunque en la foto solo salga él)… Si encima trabaja en algún bar o discoteca… ay, amigo, entonces estás perdido.

5. El que escribe en arameo antiguo.

Lo reconocerás enseguida: es el que pone cosas del tipo “NiNiiooOO ganitaS YA kempieZe el FindeeE”. Caligrafistas de todo el mundo investigan desde hace años a este tipo de contactos y su encriptado sistema de comunicación verbal. Según las últimas teorías, podría tratarse de un código secreto para comunicarse entre ellos de cara a un nuevo orden mundial dirigido por tetes y tetas.

6.- El polemista.

El polemista es fácil de identificar, ya que se mete en todos los fregados habidos y por haber. De vez en cuando publica en su propio muro, sí, pero generalmente lo verás en el formato “Fuanito ha comentado el estado de Menganito”. En ese momento sabrás que Fulanito está poniendo a parir a Menganito o a cualquiera que haya aparecido por ese hilo. Da igual que se hable de política, de fútbol o de lápiz de labios. Para el polemista todo el mundo es imbécil y no puede quedarse de brazos cruzados.

7. El autocompasivo.

El autocompasivo es aquel que deja patente es su muro de Facebook lo mal que se siente o lo feo que está. Pero que no te engañe: lo único que busca es recibir comentarios como “Guapaaaaaaa!!!” o “Venga, que tú vales mucho y puedes con todo!!”.

8. El magufo.

Uno de los más recientes, pero no por ello menos odioso. El magufo es el que comparte la típica información que asegura que se ha descubierto una cura natural contra el cáncer pero las farmacéuticas no quieren que salga a la luz. También te hablará de reikis, chakras y de por qué tomas leche si ningún otro animal la toma.

9.  Al que le cuelan los «Quién te admite».

Este contacto, aunque odioso, es medianamente entrañable, ya que es el que cae en todas esas trampas que huelen a mentira desde la otra punta del planeta. De repente verás en su muro publicaciones como ‘Descubre quién te ha borrado de su Facebook’, ‘Esta chica se desmadró una noche y no veas lo que hizo’ o ‘Whatsapp gratis disponible para PC’.

Si lo ves publicado en su perfil, a esas alturas ya sabrá que la información del enlace era mentira; lo que quizá no sepa es que acaba de dar permiso a una página web para publicar estados en su nombre.

10. El que vincula su cuenta con Twitter.

Este contacto es paradójico, ya que Facebook no le estimula lo suficiente, pero su desidia no es tan grande como para pasar de él, con lo que decide vincularlo con su recién estrenado perfil de Twitter. Lo que no comprende es que Facebook y Twitter son dos tipos de redes sociales muy distintas, con lo que, si mantiene una actividad moderada, acabará mutando y convirtiéndose en el hiperactivo.

11. Y de Yapa!!….el que hace listas de los contactos más odiosos.

El que hace las típicas listas de ‘Diez tipos de contactos a los que odias tener en tu Facebook’ es, si cabe, el peor de todos. Se arroga a sí mismo una aparente superioridad intelectual, por lo que no solo piensa que todo el mundo es idiota menos él, sino que, además, se ve en la imperiosa necesidad de comunicarlo al mundo.

 

Visto en TECNOXPLORA